Sueño y estudio

Llega la temporada de exámenes finales, acompañada de café, nervios, horas de estudio en la biblioteca y reducción de horas de sueño.


 Resulta comprensible que si 24 horas al día no nos bastan para compartir el tiempo dedicado al estudio con comer, ir a clase, hablar por telefono y dormir, le quitemos el tiempo a las horas del sueño, ya que suelen ser horas donde el entorno es el más silencioso de toda la jornada.


Aunque si queremos tener un buen aprendizaje, que las horas nos cunda y que el tiempo que le dedicamos sea suficiente y rentable, atentos a lo siguiente:

Estudios recientes muestran la profunda relación de los mecanismos del sueño con las capacidades humanas para memorizar. 

La escasez del sueño tiene muchísima influencia negativa en nuestras habilidades para aprender y memorizar información. El estudio llevado a cabo en dos grupos de voluntarios encontró que estas capacidades se reducen drásticamente en casos de la privación del sueño. De este modo, en vista de cualquier examen, resulta mucho mejor no sólo dormir bien, también ensayar o repasar antes de acostarse, para que la información se “digiera” en el cerebro durante la fase MOR o REM (Movimientos Oculares Rápidos) del sueño.Esta fase, se suele dar a los 60-90 minutos tras haber comenzado a dormir y durante un sueño de unas 8 horas suele aparecer unas 4- 5 vece, por lo que resulta vital la necesidad de dormir al menos 8 horas para que nuestros aprendizajes se afiancen.

Otros experimentos relacionados con el vínculo del sueño y la memoria tratan con el problema del sueño fragmentado. Según la nueva investigación -publicada en Proceedings of the National Academy of Science (PNAS) (Actas de la Academia Nacional de Ciencia), el sueño fragmentado dificulta la formación de recuerdos permanentes.



El Dr. Luis de Lecea afirma que “independientemente de la cantidad total de sueño o la intensidad del sueño, una mínima unidad de sueño interrumpido es crucial para la consolidación de la memoria". Esto tiene que ver con que los recuerdos de eventos experimentados de día se fijan en la memoria a lo largo de la fase del sueño profundo. “Así que cualquier cosa que afecte al sueño tendrá un efecto en ese proceso en menor o mayor grado" expresa el doctor Neil Stanley, experto en sueño y ex-presidente de la Sociedad Británica del Sueño.


Esto nos lleva a confirmar algo que en repetidas ocasiones he mencionado en entradas anteriores que es que: Al dormir, se activan las áreas cerebrales que se han activado durante el día, y  si hemos estado memorizando, po ejemplo, durante la noche, memorizaremos también. 

Es por tanto que en etapas de exámenes tenemos que tener en cuenta:

  1. Organizarnos el tiempo de estudio, los apuntes y los temas, para ahorrarnos tiempo y emplearlo, sobre todo, en el estudio.
  2. Una buena alimentación, donde la glucosa (azúcares) no quede eliminada de nuestros hábitos alimenticios, ya que el cerebro consume glucosa y es necesario su buen funcionamiento para el aprendizaje.
  3. Dormir al menos 8 horas durante las noches.
  4. Repasar los conocimientos antes de irnos a dormir, pero no en la cama, ya que tenemos que tener presente que la cama es un lugar donde descansar y no para ejercitar nuestra mente.
  5. Cenar de forma ligera, de forma que podamos conciliar el sueño con facilidad.
  6. En momentos de estudio, hacer descansos breves de unos 10 minutos para despejarnos.

Sin más, deseo mucha suerte a todos los que os presentéis a exámenes de selectividad, pruebas de acceso o exámenes finales!! y no olvideis dormir!!







No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Coméntanos qué te ha parecido!

Visitas